Un niño de un año y cuatro meses murió asfixiado en su residencia del sector de Cienfuegos, al noroeste de Santiago al atragantarse con un caramelo que lamía.
Se trata de Benjamin Antonio Delance que residía en la calle 7 número 9 del referido barrio santiaguense.
El bebé era hijo de Carlos Antonio Delance y Luz Alexandra Díaz y fue encontrado agonizando por un pariente, procediendo a trasladarlo al hospital periférico de Cienfuegos, donde falleció.
La muerte del niño ha causado mucha conmoción y tristeza entre sus familiares. La tarde de este martes fue sepultado el Cementerio Cristo Viviente del Ingenio Arriba, cerca de Cienfuegos.
Médicos y autoridades han advertido a los padres y demás adultos que tengan cuidado con los niños pequeños y de no darle nada a chupar que los pueda atragantar, y que en caso de hacerlo tiene que ser con la ayuda de un adulto.
Listin Diario