Pocos recuerdan hoy celebración Día de San Andrés, pero muchos sí festejaron Halloween
SANTO DOMINGO.- El Día de San Andrés se conmemora este martes, 30 de noviembre, pero los dominicanos han perdido esa tradición en la que las celebraciones en todo el país incluían el lanzamiento de polvo talco, harina de trigo y hasta huevos hueros dañados.
La conmemoración se ha ido perdiendo, debido al proceso de transculturación que ha experimentado la sociedad dominicana en las últimas décadas.
Sin embargo, a pesar de que ese día pasa casi desapercibido en el país, otras festividades como el Halloween (Noche de Brujas en Estados Unidos), han aumentado el número de adeptos que las celebran como si se tratara de una tradición dominicana.
En las festividades de San Andrés participaban miles de jóvenes de diferentes edades de la capital y demás poblaciones de la República Dominicana, ya que la misma constituía una verdadera fiesta popular.
Durante la celebración se escenificaban peleas, muchas de las cuáles se originaban por las sustancias que algunos desaprensivos lanzaban contra personas que caminaban por las calles de pueblos y ciudades.
Muchos atribuyen también el poco interés que despierta ese día a la poca publicidad que le dan los medios de comunicación, contrario a otra época cuando miles de jóvenes salían a las calles para lanzar todo lo que encontraban, a sus amigos y otras personas que encontraban a su paso.
San Andrés fue martirizado al crucificársele en una cruz en forma de X que hoy lleva su nombre.
Nació en Betsaida, población de Galilea, situada a orillas del lago Genesaret. Era hijo del pescador Jonás y hermano de Simón Pedro. La familia tenía una casa en Cafarnaum, y en ella se hospedaba Jesús cuando predicaba en esta ciudad.
El nombre significa “varonil” . Tuvo el honor de haber sido el primer discípulo que tuvo Jesús, junto con San Juan el evangelista.
SANTO DOMINGO.- El Día de San Andrés se conmemora este martes, 30 de noviembre, pero los dominicanos han perdido esa tradición en la que las celebraciones en todo el país incluían el lanzamiento de polvo talco, harina de trigo y hasta huevos hueros dañados.
La conmemoración se ha ido perdiendo, debido al proceso de transculturación que ha experimentado la sociedad dominicana en las últimas décadas.
Sin embargo, a pesar de que ese día pasa casi desapercibido en el país, otras festividades como el Halloween (Noche de Brujas en Estados Unidos), han aumentado el número de adeptos que las celebran como si se tratara de una tradición dominicana.
En las festividades de San Andrés participaban miles de jóvenes de diferentes edades de la capital y demás poblaciones de la República Dominicana, ya que la misma constituía una verdadera fiesta popular.
Durante la celebración se escenificaban peleas, muchas de las cuáles se originaban por las sustancias que algunos desaprensivos lanzaban contra personas que caminaban por las calles de pueblos y ciudades.
Muchos atribuyen también el poco interés que despierta ese día a la poca publicidad que le dan los medios de comunicación, contrario a otra época cuando miles de jóvenes salían a las calles para lanzar todo lo que encontraban, a sus amigos y otras personas que encontraban a su paso.
San Andrés fue martirizado al crucificársele en una cruz en forma de X que hoy lleva su nombre.
Nació en Betsaida, población de Galilea, situada a orillas del lago Genesaret. Era hijo del pescador Jonás y hermano de Simón Pedro. La familia tenía una casa en Cafarnaum, y en ella se hospedaba Jesús cuando predicaba en esta ciudad.
El nombre significa “varonil” . Tuvo el honor de haber sido el primer discípulo que tuvo Jesús, junto con San Juan el evangelista.
Una tradición muy antigua cuenta que el apóstol Andrés fue crucificado en Patrás, capital de la provincia de Acaya, en Grecia. Que lo amarraron a una cruz en forma de X y que allí estuvo padeciendo durante tres días, los cuales aprovechó para predicar e instruir en la religión a todos los que se le acercaban.
Dicen que cuando vio que le llevaban la cruz para martirizarlo, exclamó: "Yo te venero oh cruz santa que me recuerdas la cruz donde murió mi Divino Maestro. Mucho había deseado imitarlo a Él en este martirio. Dichosa hora en que tú al recibirme en tus brazos, me llevarán junto a mi Maestro en el cielo".
La tradición coloca su martirio en el 30 de noviembre del año 63, bajo el imperio cruel de Nerón.