"Me criaron para hacer las cosas bien, y no espero ser reconocido, ni recompensado"

Santo Domingo.- "Mis padres me inculcaron que hay que tener valores morales, y que lo único que nos hace avanzar es el trabajo honesto, que no hay que robar, ni tampoco cometer ningún acto reñido con la moral", así se expresó el cabo de la Policía Nacional asignado a la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMET), José Alberto de los Santos, que el pasado domingo se encontró un sobre con RD$100 mil, propiedad del funcionario del Centro de Exportaciones e Inversiones de la República Dominicana (CEI-RD), Horacio Álvarez.
Residente en La Zurza, proviene de una familia muy pobre. Su padre, Feliciano de los Santos, los crió haciendo "chiripas", y su madre, Antonia de la Cruz Manzueta, de 65 años de edad, se dedica a los quehaceres domésticos.
El cabo José Alberto de los Santos dijo que su deseo fue siempre ingresar a la Policía para hacerse miembro de la AMET, donde gana RD$7,500 al mes. Es padre de un niño que va a una escuela pública, y paga de casa RD$3 mil.
"Nunca pensé en cogerme ese dinero, inmediatamente lo devolví a su dueño, y él me estaba dando una cantidad, y no se la acepté, le dije que como Policía estamos para servirle a la ciudadanía", recordó.
El cabo De los Santos sólo ha escuchado que será ascendido al rango de sargento, pero ni el director de la AMET, general Juan Brown Pérez, ni el jefe de la Policía Nacional, mayor general Manuel Castro Castillo, lo han llamado, ni mucho menos recibido en sus respectivos despachos.
Es estudiante de odontología en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde cursa el segundo semestre de la referida carrera, no tiene más recursos que los que le da su sueldo, y quiere avanzar y darle una educación de primera calidad a su hijo de ocho años.
Dijo que no espera nada a cambio de su gesto, y que lo hizo porque entiende que fue lo mejor, porque los valores hay que mantenerlos por encima de cualquier tentación.
El cabo José de los Santos halló el sobre con el dinero en la avenida Rómulo Betancourt esquina Privada, en la capital, poco después de que el señor Álvarez se desmontara de su automóvil para ingresar a una sucursal bancaria para pagar una tarjeta de crédito. "Este hecho es una muestra evidente de honradez y seriedad incuestionable", dijo Álvarez.
El cabo De los Santos aspira a graduarse de odontólogo, y ejercer su profesión con decoro para ayudar a su familia, y a su madre, que ya no puede trabajar por los años.
En medio de la euforia que causó el hecho, el general Brown Pérez anunció que el alistado sería reconocido por su interés, pero aún no ha sucedido nada.
Álvarez, dueño del dinero que utilizaría para pagar una tarjeta de crédito, agregó que "agentes como De los Santos dignifican el uniforme de la AMET y la de la Policía y, por consiguiente, deben servir de ejemplo para sus demás compañeros, y para toda la sociedad dominicana".
También le remitió una comunicación al director de AMET, vía su oficial de prensa, Roberto Lebrón.
"Yo no espero ser reconocido, ni recompensado, sé que hice lo correcto, y si se me presenta la oportunidad otra vez, haré lo mismo, porque fue lo que mis padres me enseñaron", dijo De los Santos.